Yoü And I - Havardr O. Bährsson

Yoü And I

Granny's diner | Con Havardr | 8:00 am

No quería entrar en Granny's  porque hay estaba el chico que la hacia sentir de una forma en la cual no se había sentido antes de conocerlo, en verdad fue algo tan repentino que cuando lo viera hace un tiempo atrás no pudiera dejar de pensar en el y de querer saber un poco mas de el. Lo único que no podía acercarse a el puesto los nervios la traicionaban y salia casi corriendo cada vez que pasaba mucho tiempo hablado con el, a pesar de ser uno que otro saludo amable lo cual es lo máximo que han podido hablar gracias a la pena que siente. En fin que solo suspira fuertemente, luego de estar unos minutos afuera del establecimiento porque debía tener valor siempre para entrar y hacer el pedido tratando de no toparse con el aunque con solo verlo de lejos sentía un salto en el corazón.

Comenzó a caminar lentamente hacia la entrada del establecimiento, así que sin pensarlo dos veces entro en el lugar porque tenia mucho tiempo fuera como si estuviera esperando a su padre que le dijo muy bien que fuera sola porque se quedaría haciendo una pintura todo el día. Además no tenia trabajo hasta las dos de la tarde en el día de hoy, así que solo debía entrar y sentarse a desayunar sola mientras el chico que la hace perder la cabeza esta pasando cerca de ella todo el tiempo. Haciendo su entrada en el lugar lo primero que vez es a Havardr, esto hace que le sonría amable mente mientras rápidamente se dirige hacia la barra para pedir unos pancakes con un vaso de jugo de naranja.

Al hacer su pedido esta va hacia una mesa a sentarse cerca de la ventana, en lo que espera su peído y para hacer la espera mas corta saca un libro para leer que titulado : The Selection, de Kiera cass.Un libro que llego a sus manos por una recomendación que le hicieron en la escuela, para pasar un poco el tiempo y en verdad le estaba gustando en gran manera el libro.

You and I

Granny's | Vic | Temprano

A Havardr le tocaban los turnos de mañana aquella semana y en lo único que podía pensar era en no dormirse mientras hacía los cafés. Storybrooke estaba bastante lleno de vida a aquellas horas, quién lo diría. Desde que había abierto (tan sólo una hora), ya había preparado cinco desayunos y vendido varias cajas de tabaco. Estaba pasando el paño por la barra cuando entró ella. Otto siempre miraba la puerta cuando entraban nuevos clientes pero aquella vez, no lo hizo. Fue por eso que cuando escuchó su voz y alzó el rostro para verla, se quedó casi sin palabras. Era ella, la joven Victoire. Le costó un poco reaccionar por lo que no pudo más que dedicarle una pequeña sonrisa y apuntar el pedido de la muchacha. Y os preguntaréis que quién era esa chica para crear esos extraños y confusos sentimientos en el joven Bährsson. Bien, ella era Victoire, una pequeña y dulce flor que se pasaba por los pensamientos de Otto de forma inconsciente, cada vez más y más a menudo.

El chico albino puso el pedido de la joven en la bandeja y, sin pensárselo dos veces añadió un papelito en el cual estaba escrito con letra no muy trabajada las siguientes palabras:


Tomó aire mientras cogía la bandeja e iba con ella hacia la mesa en la cual estaba sentada Victoire. Como si nada dejó el pedido de la muchacha en la mesa, como solía hacer, poniendo la notita bajo los pancakes de forma disimulada— Serán cuatro con diecisiete. —dijo en tono neutro, intentando no parecer nervioso. Esperó a que ella sacara la cartera o le dijera que lo pagaría al salir, como muchas otras personas hacían. Pasó un mechón de su propio pelo tras la oreja, tamborileando los dedos contra la bandeja de metal, la cual tenía abrazada contra el pecho, como hacía con sus peluches los cuales ahora pertenecían a sus hermanos.

Yoü And I

Granny's diner | Con Havardr | 8:00 am

Vicky había pasado la prueba de fuego al tener que hacer su pedido y sonreirle al joven albino, a la verdad esta se ponía en verdad muy nerviosa así que trata de no dejar que vea sus mejillas ponerse rojas pro sus sentimiento. Así que cuando hizo su pedido esta se fue a su mesa de siempre para poder leer un poco mas de su emocionante libro, el cual la hacia suspirar en gran manera porque deseaba poder tener una hermosa historia de amor en su vida. Cuando llego su pedido era Havard mismo que trajo su pedido esta lo miro tierna mente mientras este le dice la cuenta.- Muchas gracias, pagare cuando salga.- Comento mientras deja de mirarlo unos segundos y siente como sus mejillas se van poniendo un poco rojas, así que vuelve a mirarlo.- Espero tengas bonito día, Havard.- Dijo sonriendo pero a la verdad estaba muy nerviosa en verdad, así que mira su pedido y nota que algo sale por debajo de su plato. Mira con mas curiosidad y comienza a levantar el plato, cuando ve es una nota lo esta debajo lo cual hace que su corazón se acelere en gran manera. Al suspirar un poco fuerte esta abre la nota y cuando lee la nota, sonríe en gran manera para ver al chico autor de la nota.

- No me importa que me llames Vic,Ott.- Comento sincera mente y un poco apenada en verdad, porque no se esperaba que pasaría esto.- Y si, podemos quedar cuando quieras.- Dijo finalmente, sintiendo como se estaba poniendo roja de la vergüenza. No era que estaba mal sino que era nuevo para ella todo esto que estaba pasando en estos momentos entre los dos, ademas se lo había imaginado muchas veces pero esta en verdad fue muy diferente a todo lo que se imagino.

- Gracias, por esto.- Confeso, porque no pensaba que un chico como el se fijaría en una chica como ella.

You and I

Granny's | Vic | Temprano

El peliblanco ya se iba a ir de allí en cuanto ella le confirmó que pagaría nada más salir pero claro, para su sorpresa, la chica había sido más curiosa de lo que esperaba y había encontrado el papelito antes de tiempo. Hav estuvo a puntísimo de dar media vuelta y correr hacia el gran congelador para quedarse allí dentro y que nadie le encontrara pero ya era demasiado tarde. Mientras ella leía la nota, sus pálidas mejillas se tornaban rosadas, cada vez más y más. Intentó calmarse a sí mismo y parecer un chico normal pero, no, no podía— Eso está guay. —dijo aún tamborileando los dedos en la bandeja— E-Es decir, ¿e-esta noche te viene b-bien? —añadió apresuradamente al ver que había estado a punto de crear un silencio incómodo. ¿Por qué estaba tan nervioso? De normal, él no se ponía nervioso— Podría ser aquí, en el Granny's... después de que cierren. H-Hay lasaña. —jamás de los jamases había pedido salir a una chica y, en el caso de haberlo intentado, ella nunca había aceptado.

— Dejaré que te lo pienses... yo... llámame, si quieres. —cogió el papel de las manos de ella con delicadeza, apuntando su número en el reverso. Después se lo volvió a dar y con una sonrisa dio un par de pasos hacia atrás, sin dejar de mirar esos ojos azules de la muchacha. 'Gracias a ti.', quiso decir aunque le fue imposible ya que su compañera de trabajo, Clementine, apareció de la nada haciendo así que Havardr se chocara con ella, llenándolo de un batido de fresa. Tuvo que aguantar el reproche de su compañera, pero al instante ya estaban como amigos de nuevo. No pudo evitar escuchar los cuchicheos de algunos de los allí presentes, hablando sobre su torpeza. Suspiró mientras recogía el estropicio que había armado, dispuesto a hacer un nuevo batido de fresa, con extra de nata.

¿Así quería entrar él al cuerpo de policía de la ciudad? ¿Poniéndose nervioso con todo lo que hacía y estropeándolo todo a la mínima? Un buen detective lo que debía hacer era ser meticuloso, perfeccionista, exacto en sus movimientos y pensamientos, listo, rápido y debía saber manejar una pistola. Quizá Havardr debía de empezar por el aprender a disparar aunque no imaginaba el poder hacerlo ya que el arma pesaba y sus brazos eran tan endebles que le costaría mantenerla en alto apuntando al ladrón, como había visto hacer una y otra vez a los policías de las series y películas. Ojalá mi vida fuera una película, sería alguien importante, pensó.

Yoü And I

Granny's diner | Con Havardr | 8:00 am

No podía creer lo que estaba pasando en estos momentos, a decir verdad no paso nunca por su cabeza que el chico que la tiene tan interesada este interesado en tener algo con ella. Así que al ver lo que decía el papel una gran alegría inundo todo su mundo, pero sobre todo hizo que su corazón latiera a mil por hora.- Si esta guay.- Comento sinceramente mientras no puede dejarlo de mirar, ya que a pesar de estar un poco alejado de ella le gusta tener esta cercanía que surgen entre los dos. Rápidamente este hizo una pregunta que se contesto el mismo, lo cual hace que esta sonría tierna mente sin parar de escucharlo hablar porque le parecía de lo mas divertido ver que no era la única que estaba con nervios en este momento tan importante. Al menos lo es para ella que nunca ha salido con un chico en toda su vida, pero ahora tendrá el chancee de poder tener una cita por primera vez.

Una vez mas cuando iba a comenzar a responderlo este mismo se adelanto para hablar una vez mas, luego de eso este toma el papel en el cual esta anotando algo y esta cierra su libro para poder prestarle toda la atención que este se merece. Este paso nuevamente el papel a sus manos y en el estaba su numero, lo cual hace que esta no deje de verlo con un poco de rojo en sus mejillas, pero sin esperarlo este choca y es bañado por batido de fresa. Vic se tapa la boca con las dos manos por el asombro y poco a poco destapa su boca , para ver como es regañado ademas de tener que limpiar todo. La chica suspira y se acerca a el, su corazón late a mil por hora pero sigue a pesar de tener un poco de miedo.- M -Me parece bien esta noche.- Confeso finalmente.- L-La lasaña es de mis plato favoritos como la batida de fresa.- Dijo finalmente tomando de una mesa cercana un `par de servilletas y limpiarle unas gotas que habían caído en su cara, no era mucho en comparación con lo que tenia encima pero quería que supiera que estaba bien todo.

- G-Gracias por ser tan lindo conmigo.- Confeso con una gran sonrisa en su rostro.